Si prefieres escuchar el email en lugar de leer, aquí te dejo el audio.
En mi grupo de amigos somos, si no me fallan los cálculos, 19. Me refiero a eso que llamamos “pandilla”.
Como ves, somos un grupo grande, supongo que es una de las ventajas de ser de pueblo.
De esos 19, creo que solo somos 3, los que no tenemos hipoteca y vivimos o hemos vivido alquilados.
Y de esos 3, solo yo, ni busco, ni he buscado una vivienda para comprarme.
Los otros 2, o están en búsqueda activa y no encuentran su oportunidad, o lo han estado y se han resignado.
La consecuencia de esto es que siempre que quedamos, si sale el tema de inversiones, vivienda, alquiler, o similares, las preguntas siempre son las mismas, aunque han ido evolucionando con el tiempo.
Cuando vivía alquilado, la pregunta siempre era:
“Tío, y ¿piensas estar tirando el dinero a la basura toda tu vida? Te vale la pena comprarte el piso, ya que pagarías incluso menos de letra que de alquiler”
Cuando tuve a mi primer hijo, hubo una variante de esa pregunta que era:
“Coño, y si tienes que cambiar de piso, ¿vas a ir mareando al niño?”
Ahora, tengo 2 hijos, y desde hace 3 años vivo en la playa, en la vivienda familiar de mi suegra, y la pregunta ha vuelto a evolucionar:
“Fran, y ¿con dos hijos tampoco piensas comprarte un piso? ¿Prefieres vivir en la playa y tener que llevar a los niños al cole todos los días al pueblo? Macho, es que así no puedes ni tomarte una cerveza tranquilo porque luego tienes que volver con coche.”
Lo de la cerveza lo solucioné hace algo más de dos años, porque ya no bebo nada, así que una preocupación menos.
Y luego, para que te hagas una idea, desde mi casa de la playa al pueblo hay 7 km.
En coche tardo 13 minutos desde que salgo de mi casa, hasta que dejo al mayor en la puerta del cole.
En cualquier gran ciudad, creo que 13 minutos será lo que se tarde en llegar desde el piso al coche, para luego dejar a los niños en el cole.
Pero bueno, aparte de algún pequeño inconveniente, es verdad que hay desventajas de vivir alquilado, o en mi caso, en la casa de verano de tu suegra.
Algunas desventajas
Para empezar, solo disponemos de 2 de las 3 habitaciones de la casa. La tercera es de mi cuñada, y claro, no la usamos para nada.
Es verdad que solo viene a vivir en verano, y este año dudo que venga mucho, pero es su habitación, así que no podemos disponer de ella.
Otro punto negativo es el hecho de no invertir para modificar cosas en la vivienda, como por ejemplo mi despacho.
Si esta casa fuese mía, no tendría ningún problema en gastarme dinero, montándome un mejor despacho, en abrir una puerta que quiero, en cerrar una de las terrazas con cristaleras, o incluso en hacer una mega reforma y hacer una cocina-comedor espectacular.
Otra putada son los gastos mensuales. Que sí, que no pagamos alquiler, pero es una urbanización pequeña, que tiene una piscina enorme, y unos propietarios que lo quieren, todo en perfecto estado y reluciente, por tanto, los gastos mensuales son elevados.
Y ahora la gran ventaja
Durante muchos años, a esas preguntas de porque no me hipotecaba como todo el mundo, no tenía una respuesta molona. Solo las típicas:
“No quiero atarme a algo que tengo que pagar a 35 o 40 años” o “Y si mañana me sale curro en Alemania, ¿qué hago? ¿Pagar hipoteca y alquiler?”
Ahora ya tengo una respuesta muy molona, gracias a leer a Taleb, y a la inspiración de leer un correo de Álvaro de hace unos días.
De hecho, tengo ganas de que me lo vuelvan a preguntar y poder responder:
“No quiero hipotecarme para salvaguardar mi opcionalidad”
Estoy pensando en la cara que pondrían un par de amigos míos al escucharme eso y me estoy descojonando.
Según Nassim Taleb, la opcionalidad es la capacidad de tener la opción de elegir entre diferentes cursos de acción en función de las incertidumbres y los eventos futuros que puedan surgir.
El ejemplo de “y si me sale curro en Alemania” sirve para explicar esto, pero voy con otro.
Imaginemos que, como mis otros 16 amigos, me hubiese hipotecado con una vivienda, pagando una letra de unos 600€/mes, más todo lo que cuelga. Impuestos, gastos, seguros… y vamos a dejar el tema de los intereses.
Pongamos que entre unas cosas y otras, se nos van 800€/mes en la vivienda a mi mujer y a mí.
Muy posiblemente, cuando nos planteamos como mejorar el nivel de inglés de nuestro hijo, la opción de ir a un colegio británico a aprender inglés el mes de julio, la hubiésemos tenido que descartar.
Cuándo, en relación con esto, se nos planteó la idea de ir a Irlanda de vacaciones este año, seguramente hubiésemos tenido que replanteárnoslo, ya que nos vamos los 4, y mi madre, y los hoteles en Cork valen una maldita pasta.
Seguramente tendría que quitarme de la cabeza la idea de irme a vivir fuera con mi familia durante uno o dos años para mejorar nuestro nivel de inglés y vivir una experiencia.
Cuando tus gastos fijos, son un % elevado de tus ingresos, tu opcionalidad se va a la mierda.
Pero no solo se pierde opcionalidad con este tipo de decisiones. Hay otras, menos aparentes, pero que también te restan opcionalidad.
Por ejemplo, lo que te comentaba antes de mi decisión de no beber alcohol.
Beber alcohol, sobre todo cuando salía de fiesta con mis amigos, me quitaba la opción de hacer muchas cosas.
No puedes pillar el coche para volver a casa cuando quería.
No puedes decidir hacer planes los domingos porque la resaca te mata.
Y si algún día se te va de las manos, durante ese rato pierdes el 100% de tu opcionalidad, porque no eres tú quien está al mando entre los ojos y el cogote.
Como todo en la vida, cada uno decide que le resta opcionalidad, decide si lo tolera, y por supuesto, decide si hace algo o no.
¿Qué decisiones tomas tú para no perder opcionalidad y en que cosas?
Me encantará leerte en comentarios o que me respondas al email.
Un abrazo muy disperso,
Nassim Taleb, digo Fran Lledó.
PD: Mira la siguiente encuesta que tengo algo interesarte que preguntarte.
Pero hombre, que no tienes esos 800€ de gasto porque estas de prestado en casa de un familiar. Igual tus amigos ni hab tenido oportunidad de "ahorrarse" esos 800€. No es que no los tengas de gasto porque no tienes hipoteca, con alquiler pagarias esos gastos similares. Tu caso es diferente porque estás de prestado. Si estás cómodo en esa situación, eso ya es cosa de cada uno, y de cada familia, pero no te puedes comparar con el resto de amigos.