Tres ideas interesantes que lo mismo te hacen pensar

O no

Hace 1 mes desde la última vez que escribí por aquí, y la verdad es que no tenía intención de hacerlo hoy, pero los Reyes Magos de oriente me han traído con unas horas de adelanto, algo de inspiración, y quería compartirla.

Bueno, la verdad es que la inspiración me la ha dado mi hijo, no los reyes. Hoy a decidido dar por saco toda la noche, y a las 05:20am, después de dar mil vueltas en la cama, he decidido levantarme a hacer algo, ya que no podía dormir.

Primero me he puesto a escribir en mi diario de reflexiones. Luego he leído un rato. Eso me ha llevado a reflexionar sobre mi último año, y por último y como consecuencia inevitable, ha empezado en mi cabeza una orgía de ideas.

De todas ellas voy a dejarte tres, por si te sirven.

Decidir hacia donde quieres ir es vital para tener una buena vida

Leyendo sobre como gestionaban los estoicos el tema de desear cosas, me he topado con una cita de Séneca que es brutal, y dice así:

“No me podrás nombrar ni uno que sepa cómo empezó a querer lo que quiere. No se movió siguiendo un plan, sino que un empujón lo estrelló contra ello […] Es vergonzoso, en lugar de caminar, dejarse llevar y, de pronto, pasmado en medio del torbellino de sucesos, preguntarse: “¿Yo cómo he llegado hasta aquí?”

Vivir en piloto automático es lo más común y normal del mundo. De hecho, según un estudio sacado del forro de mis gónadas, es lo que hace el 90% de la gente (más o menos).

La gente, y me incluyo en muchos temas, no se plantea porque hace lo que hace, o porque piensa lo que piensa. Ni mucho menos, que cojones quiere. A mí me ha costado horrores pararme a pensar que quiero de la vida, y como te decía, soy consciente de que en algunos temas, aún no lo he hecho.

Esto que te voy a contar es un simple ejemplo, pero sirve para ilustrarlo.

Arturo García, (a.k.a Cerdo Estratega) es uno de mis referentes en este de los negocios online y el marketing. Es un tipo que ha ganado bastante dinero, que es un referente en el sector, y que además conozco personalmente y es una maravilla como persona.

Ni corto ni perezoso, el señor García ha decidido que ya no quiere saber nada del marketing. Intuyo, que se ha parado a pensar que quiere de la vida, y parece ser que quiere ser carpintero. Has leído bien, carpintero.

¿Crees que le habrá resultado fácil decidir empezar de 0 cuando podría seguir ganando el dinero que “quisiese” con el marketing online? ¿A que no? Pues ahora, súmale que tiene dos hijos.

Fluye con la vida, aunque te tengas que obligar

A principios de 2024 escribí un post por aquí contando los que iban a ser mis propósitos para este año pasado.

A las pocas semanas me di cuenta de que había sido un error y que estaba volviendo a caer en algo que en mis últimos años he hecho muchas veces.

Pensar mucho en como quiero vivir, en lugar de centrarme en vivir.

Esta idea parece que es opuesta a la anterior, pero nada de eso, es complementaria. No puedes fluir con la vida, si no tienes el camino marcado, es decir, las cosas importantes muy claras. El problema (creo) es que como nos da miedo afrontar las cosas importantes de la vida, nos centramos en tomar microdecisiones que nos acerquen a pequeños objetivos, y así nos creemos que vamos bien.

Que si quiero aprender inglés, perder peso, tocar el piano o aprender ganchillo. Eso está bien, pero ¿qué hay de lo gordo, de lo importante?

Bueno, la cosa es que este 2024 ha sido el primer año que no he cumplido ninguno de los propósitos que me marqué esa primera semana del año, y ha sido un año buenísimo, tanto en lo profesional, como en algunas dimensiones de mi vida personal.

El motivo creo que es porque tengo cada vez más claro el camino, y me dejo fluir.

Esto se acaba y parece que no nos enteramos

Mira, siempre he sido un tipo algo precoz. Fui el primero de mis amigos en casarme y el primero en tener hijos. Por eso, aunque aún tengo 36, tengo la sensación de estar en una especie de “crisis de los 40” anticipada.

La cosa es que cada vez soy más consciente de que cada día que pasa, es un día menos, y que de esas 4.000 semanas que vivimos (más o menos), si todo va bien, me quedan algo más de la mitad.

Queridísimo lector, no sé cómo vas tú de semanas, pero es un enorme error, seguramente el más grande de todos, posponer tu felicidad pensando que no hay prisa, que mejor mañana que hoy me viene mal.

Epicuro dijo:

“Hemos nacido una vez y no puede haber un segundo nacimiento. Por toda la eternidad nunca más seremos. Pero tú, aunque no eres señor del mañana, pospones tu felicidad. Desperdiciamos nuestras vidas retrasando las cosas, y cada uno de nosotros muere sin haber realmente vivido.”

Dicho esto, te deseo un fantástico año 2025, y sobre todo te deseo que, si hay partes de tu vida en las que vives en piloto automático, tengas la fuerza y las ganas de dejar de hacerlo, y que te des el permiso de hacerlo, porque muchas veces el problema es solo ese, darse el permiso.

Y acabo…

Si este post/email te ha inspirado o ayudado de alguna manera, envíaselo a esa persona que te acaba de venir a la cabeza.

A esa persona que está cabizbaja, que tiene problemas en el trabajo, con la pareja, y que sabes que necesita un empujón. Igual le ayuda.

Un abrazo muy disperso,

Fran Lledó