Sueño desbloqueado

Te cuento gracias a quienes, dentro.

Hoy es un día especial para mí, y nada tiene que ver con que sea festivo, ni con la constitución Española. Es un día especial por el lugar desde el que te escribo. Ahora te lo cuento, porque tiene miga, y tengo que ir paso a paso.

Como te comenté en el último post, en 2022 tuve un hijo, que realmente no quería tener, y eso me sumió en una crisis personal importante.

Sin quererlo, me había metido de nuevo (era el segundo) en un embolao importante (si tienes hijos sabrás de qué hablo), y todo por no saber poner límites.

Eso me hacía sentirme fatal, y además, me fustigaba y me sentía aún peor, por sentirme mal, ya que me hacía pensar que mal padre, que no quería a mi hijo, y toda la retahíla de mierdas mentales que nos contamos.

A principios de 2023, una persona, que tiene casi la misma edad que mis padres, me contrató para montarle una página web, nada nuevo bajo el sol, solo que esta persona, no era común.

Era un hombre, que más cerca de la jubilación que de otra cosa, tenía un sueño, quería montar una Escuela de buena vida, quería ser Epicteto.

De cliente pasó a amigo, y luego a socio en esa Escuela, de la que ahora formo parte.

El paso previo a meterme en un berenjenal así fue hacer su programa de desarrollo personal de casi 3 días, llamado CreaTuVida, y del que alguna vez te he hablado.

Y ahí, en ese programa, en ese fin de semana, se gestó la semilla de porque hoy es un día especial.

En ese programa, conocí personas muy interesantes, de todas las edades y condiciones, que compartían un objetivo común, intentar vivir una mejor vida. Pues de todas ellas, una me hizo clic.

En una de las dinámicas, compartí con una mujer con 3 hijos, que se había ido sola a vivir a Londres, con los 3 churumbeles, y que su marido solo estaba en la casa los fines de semana por un tema de trabajo.

Y ahora voy hilando…

Desde siempre, he tenido (tengo) una espinita clavada con que nunca me fui de Erasmus, que siempre he vivido en mi pueblo, y siempre he admirado a la gente que ha vivido en partes distintas del mundo. Creo que eso te da un saber vivir, que no te lo da nada, y es algo que siempre he anhelado.

De esa conversación salí con la idea de irme a vivir a Irlanda con mi familia, pero al tiempo, me di cuenta de que a mí lo que me tira realmente no es un país en concreto, sino el verde, la montaña, el blanco de la nieve, y el objetivo cambió.

“Fran, Irlanda está de puta madre, pero no se puede esquiar, y a ti lo que te vuelve loco es ponerte unos esquís”

Bien, pues te estoy escribiendo este post, desde un piso que he alquilado para toda la temporada (hasta abril) muy cerca del Valle de Arán, mi lugar favorito de España.

No es el mejor piso del mundo, ni está a pie de pistas, ni es la casa de mis sueños (que algún día tendré, sin duda) con jardín, una gran cocina-comedor con chimenea, y con vistas a la montaña, pero es el primer paso.

Es un sueño cumplido. Un sueño cuyo trigger ya te he contado cuál fue, y por eso, no puedo hacer nada más que recomendar a todo hijo de vecino que, siente que quiere revisar cosas de su vida, o hacer algún cambio, o simplemente darse el espacio necesario para reflexionar, que venga al CreaTuvida. De verdad, es la polla con cebolla (iba a poner pera limonera por ser menos vulgar, pero si hablo así, hablo así, es mi newsletter y me la fo___ como quiero. Joder, esto sí que es vulgar).

Ahora mismo, la siguiente edición del programa, que es en enero, la tenemos completa. No hay plazas. Las solemos agotar en pocos días cuando abrimos convocatoria, así que lo que te recomendaría es que entres en nuestra newsletter, y que estés atento. La próxima será en mayo.

Además, cuando entras, recibes un audio de Pablo, el amigo y socio que podría ser mi padre, y que es la persona que conozco que más sabe de estoicismo moderno, donde cuenta 7 claves del estoicismo para tener una buena vida.

Y no lo hace desde la teoría. Pablo lleva más de 20 años aplicando esta filosofía de vida, de forma práctica, y puedo dar fe de ello.

Nada más por aquí, solo animarte a soñar, a soñar sin miedo, porque como dice Pablo en los capítulos de su pódcast (parafraseando a nuestro querido Andrés Montes, el mejor comentarista deportivo de la historia de la humanidad), la vida puede ser maravillosa.

Solo hace falta que nos atrevamos a vivirla.

Un abrazo muy disperso, desde un lugar fantástico.

Fran Lledó

PD: Desde este lugar…